
A veces vamos por la vida mirando hacia atrás, pensando en lo que pudimos hacer y no se hizo, en sueños abandonados, ilusiones, trabajos y amores que quedaron atrás. Pero por mucho que duela esas cosas están en su lugar correcto, el pasado. No es saludable vivir con tantos recuerdos, con tantas amarguras.
La vida siempre nos traerá muchas cosas con las que iremos llenando la mochila a lo largo de nuestras vidas. Pero esa mochila es tuya, es tu vida, y de vos depende cuanto pesa la mochila que cargás. Vos decidís qué se mete, qué permanece adentro, y qué cosas, recuerdos y sentimientos ya no tienen lugar en ella.